En reunión con el Ministro de Obras Públicas de San Juan, Julio Ortiz Andino, las y los consejeros regionales presentes por estos días en Buenos Aires, revisaron en detalle el proyecto binacional y se enfocaron en la necesidad de información concreta por parte de la comunidad a ambos lados de la cordillera.
El proyecto Túnel de Agua Negra es una de las iniciativas binacionales de mayor notoriedad entre las regiones de Coquimbo, en Chile, y San Juan, en Argentina. Se trata de un proyecto que apunta a mejorar la conectividad entre ambos territorios, generando las condiciones para un transporte de pasajeros, intercambio comercial y desarrollo turístico que no dependan de las condiciones climáticas en a alta cordillera.
Una iniciativa que lleva años de análisis y estudios y que durante los últimos meses se ha reposicionado en el debate nacional y local de ambos países, manteniendo apoyos y detractores entre autoridades y la misma comunidad. Por lo mismo, durante la visita de un grupo de consejeros y consejeras regionales a Buenos Aires, Argentina, se reunieron con el Ministro de Obras y Servicios Públicos de San Juan, Julio Ortiz Andino, para estudiar la iniciativa desde todos los puntos de vista.
Tras abordar las distintas aristas de la iniciativa, las autoridades de ambas regiones vecinas decidieron impulsar un proceso de información y debates de cara a la comunidad en ambos territorios, con el fin de entregar todos los antecedentes a través de un proceso participativo que buscaría que las familias de ambos territorios conozcan en profundidad los impactos y beneficios de esta mega obra.
Al respecto, el presidente de la comisión de ordenamiento territorial del Consejo Regional (CORE), Wladimir Pleticosic, destacó que el ministro es un integrante permanente de la Entidad Binacional Túnel de Agua Negra (EBITAN), por lo que conoce desde un inicio todos los estudios realizados para dar pertinencia y coherencia a esta obra binacional.
“Esta fue una oportunidad para conocer información muy relevante que no habíamos tenido la posibilidad de conocer desde el lado chileno, instancia en la que, además, pudimos establecer un inicio de acuerdo para entregar toda la información necesaria a la ciudadanía, para que conozca qué significa este proyecto, todos los estudios que se han realizado desde 2010 en adelante, cuando se firma el tratado de Maipú, que establece obligaciones y criterios para ambos países y, desde ahí, poder integrar a toda la comunidad, las 15 comunas de nuestra región”.
Por su parte, el ministro Ortiz Andino agregó que “este preacuerdo después será homologado por el Consejo Regional, para iniciar esta tarea que, en su momento, pensábamos que no era necesaria, por lo que nos encaminamos únicamente a cubrir los aspectos técnicos. Hemos hecho muchos seminarios y presentaciones en distintos lugares del mundo, pero siempre, ante una audiencia técnica. Bueno, ahora creemos que la comunidad en general debe conocer todos los pormenores, para que estemos dispuestos a hacer algo que vaya en beneficio de todos los sanjuaninos y habitantes de la Región de Coquimbo”.
El preacuerdo fue firmado al día siguiente a la reunión y deberá pasar por ratificación del pleno del CORE en sesión ordinaria. Mediante esta acción, los estudios geológicos, medioambientales y económicos desarrollados en torno al proyecto serán socializados en detalle con la comunidad, grupos interesados y gremios con el fin de profundizar en detalles como la ubicación definida para esta mega obra y los impactos económicos asociados.
Recordemos que la iniciativa considera la construcción de dos túneles principales de 13,9 kilómetros de longitud, cada uno con dos calzadas para tránsito unidireccional, los que, además, permitirán configurar el Corredor Bioceánico Central (CBC), integrando a los países que cruzan el paralelo 30° desde Porto Alegre, Brasil, hasta el Puerto de Coquimbo, en Chile.