Los servicios de alimentación, que en la Región de Coquimbo contempla la entrega de más de 135 mil raciones diarias, serán entregados bajo estrictos protocolos, de manera de cumplir con todas las medidas sanitarias para proteger todo el proceso de distribución de los alimentos, cuidando la salud de los estudiantes y de las manipuladoras.
Luego de dos años con las cocinas prácticamente cerradas -en que se distribuyeron más de 40 millones de canastas individuales de alimentos a nivel nacional-, la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas comenzó con el proceso de entrega de alimentación presencial en los comedores de los establecimientos educacionales.
Para lo cual, la institución trabajó durante todo el verano para comenzar con la entrega del servicio desde el inicio del año escolar, supervisando las bodegas de las empresas con el objetivo de asegurar el abastecimiento y funcionamiento desde el primer día.
“Este despliegue de supervisiones se extenderá durante las primeras semanas de clases, donde se verificarán las condiciones higiénicas y elementos de seguridad del personal manipulador, la existencia y estado del mobiliario, equipamiento, vajillas, el cumplimiento de las minutas, y la utilización de materias primas, entre otros aspectos”, comentó William Gutiérrez, director regional de Junaeb.
Los servicios de alimentación, que en la Región de Coquimbo contempla la entrega de más de 135 mil raciones diarias, serán entregados bajo estrictos protocolos, de manera de cumplir con todas las medidas sanitarias para proteger todo el proceso de distribución de los alimentos, cuidando la salud de los estudiantes y de las manipuladoras.
“Para apoyar esta puesta en marcha y todo el proceso, la institución distribuyó recomendaciones acerca del funcionamiento y uso de los comedores, de manera de apoyar a los establecimientos educacionales con información y consejos sobre las medidas sanitarias”, sostuvo Gutiérrez.